miércoles, 24 de septiembre de 2014

WHISKY ESTELAR


Whisky escocés madurado en el espacio 
(de abc.es)

En octubre de 2011, un cohete con whisky puro de malta, de la destilería escocesa de Ardbeg, partió al espacio desde la base aérea de Baikonur, en Kazajistán. Con esta estrambótica idea no buscaban calmar la sed de algún astronauta desorientado, ni de exportar el producto a un lugar inhóspito. Se trata, en cambio, de un pionero experimento científico que investiga cómo la gravedad cero influye en el proceso de maduración del alcohol. 

Han pasado tres años y los científicos de NanoRacks, la compañía de investigación espacial, con sede en Texas, ya se frotan las manos, impacientes, ante el inminente regreso de los viales de whisky, a mediados de este mes. Después de más de 1.000 días orbitando, analizarán la interacción entre unos compuestos microorgánicos, conocidos como terpeno, que contiene el whisky, y unas partículas de roble carbonizado, en condiciones de gravedad cero.

El alcohol recién aterrizado se comparará con una botella idéntica de la destilería de Ardbeg, en Islay, una isla del archipiélago escocés, que nunca ha abandonado la tierra firme. Los científicos dilucidarán, en un laboratorio de Houston, las diferencias entre el whisky terrenal y el espacial. 

«Este es un pequeño paso para el hombre, pero un gran salto para el whisky», declaró Bill Lumsden, director de la destilería y responsable del whisky de Ardbeg.

El experimento trata de desentrañar el funcionamiento de las complejas moléculas de terpeno y ayudar a descubrir nueva información sobre el cambio que experimentan en un ambiente de gravedad cero. Además, el viaje espacial del whisky desvelará cómo los componente químicos afectan al sabor, para posteriormente aplicar los resultados a la investigación y desarrollo de un nueva variedad de productos comerciales. «El equipo espera descubrir cómo los sabores se desarrollan en diferentes condiciones gravitatorias. Estos hallazgos podrían revolucionar el proceso de fabricación de whisky», agrega Ardbeg.

Con esas manías nazionalistas, me estaba temiendo que se produjera un atasco en la producción de la famosa "agua escocesa". Afortunadamente, parece que se ha evitado el aislamiento de Escocia y no hará falta enviar la cosa al espacio, lo que hubiera incrementado su precio a niveles inalcanzables para una persona normal. 

Al final, con un poco de paciencia, todo se arregla.

11 comentarios:

  1. Con esa prueba y si resulta que el whisky orbitado mejora de calidad, ya veo a los aficionados a comprarlo vendiendo sus propiedades para adquirir una botella. Porque si va a ser que el buen "guisky" es el que pasa tres años en el espacio, tendrán que fabricar cohetes-bodega con mucho gasto de gasofa para ir alrededor de la Tierra y volver.

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    1. Como hace muchos años que no le doy al whisky, debo confesar que su procedencia me preocupa muy poco y no pienso gastar ni uno de esos nuevos billetes de a 10 en catar esa bebida extraterrestre.
      En mis tiempos juveniles se conformaba uno con el Old Parr de 12 años.

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  2. No me preocupa nada lo que le pueda ocurrir al güisqui escocés, otra cosa bien distinta sería que osasen hacerle algo al bourbon.

    (evidentemente esas gracias no son las de Rubens... ¿y un término medio?)

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    1. DON BWANA, no olvide que al genio de Complutum le gustan las féminas al estilo de las que pintaba BOTERO.

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    2. Don Isra: lamento no coincidir con Vd. respecto a las bondades de esa cosa yankee que también llaman wisky. Siempre le encontré sabor a madera de roble con pulimento.
      Las gracias las tienen de sobra para mi gusto. Lo veo muy exigente, amigo mío.

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    3. Don Javier:
      Pues el Botero tenía un defecto en la visual que le hacía engordar todo lo que veía, aunque ya le sobrara grasa de por sí.

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  3. Voy a mirar si envío yo una botella de albariño.

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    1. Envíela Vd. certificada, no vaya a ser que se la cambien por un valdepeñas.

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    2. Así lo haré, Señor Bwana.

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  4. Pues que tengan éxito, yo con el terrenal ya voy bien y si bajan los precios mejor que mejor. Los del escocés por ejémplo ya eran precios astronómicos hace tiempo.

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  5. Lo bueno hay que pagarlo y si, además, viene del espacio, razón de más y más...

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