(de libertad digital)
Está en Goya 33 y se llama Equal. Es la primera discoteca para sordos que se ha abierto en Madrid, un proyecto apadrinado por Tripfamily.
Es una discoteca adaptada para aquellos que no pueden oír. Todas las canciones van acompañadas de un vídeo subtitulado y además, interpretadas con el lenguaje de los signos. Hay pantallas distribuidas por toda la sala para que el público pueda leer la letra sin problemas y moverse a su ritmo. Los altavoces de graves proyectan el sonido directamente a una pista con un suelo de madera que transmite las vibraciones con claridad.
Por lo que se aprecia en la foto, no parece que la adaptación haya sido un éxito, ya que da la impresión de que cada uno va a su bola, sin ninguna relación con la pareja.
Mucho más sencillo era el baile "pegado", pues no hacía falta ni siquiera música para agarrarse bien al oponente en lugar de tanta chorrada de vídeos y vibraciones,
Algunos porqué no de dedicarán a montar Belenes de Navidad y procesiones de Semana Santa en vez de a querer ser Thomas Edison.
ResponderEliminarEstá Ud. en lo cierto : esos bailarines o lo que sean no tienen pinta de saber qué están haciendo.
Pues yo creía que todas las discotecas ya estaban pensadas para sordos, o al menos para duros de oído.
ResponderEliminarNo sé que decirle Bwana, ha llegado tarde al curro y se me ha adelantado un compañero en la elección de la música de hoy... y no me importaría perder momentáneamente el oído.
ResponderEliminarLamento no poder comentar lo de esa discoteca... salvo que cuando en los años gloriosos de la fiesta madrileña encontrábame yo a las 8 de la mañana de un domingo cualquiera en el mítico New World y el sonido era tan espectacularmente alto que en la barra más alejada a la pista, con las vibraciones del suelo, se me revolvían las tripas, así que me malicio yo que el negocio de estas discotecas está en vender a precio de oro el papel higiénico en los baños (en mi época eran las botellitas de agua, a precio de benjamín de lujo).
Creo que es la noticia más curiosa que hemos leido en años.
ResponderEliminarUn saludo
Vietnamitas en Madrid
D. Javier:
ResponderEliminarEs cierto, aunque no se diferencian demasiado de los "bailes" modernos.
Bwana y amí que no me parece una buena idea.O ¿ es que hay tantos sordos en Madrid?.
ResponderEliminarDª maharani:
ResponderEliminarTambién lo pensaba yo. Siempre me llevo unos algodoncitos para amortiguar los ruidos.
D. isra:
ResponderEliminarPudiera ser, en efecto, un truco para vender papel higiénico. ¡Ya no saben qué inventar para sacarse unos eurillos! Encima, abusando de los defectos físicos de los demás.
¿¡¡¡¡¡!!!!? Uuuuuuhhhhhhh einhs.
ResponderEliminarSiempre mas tíos que tías.
Saluditos.
D. MAMUMA:
ResponderEliminarPor el volumen de sonido que calan en los cines y la cantidad de gente joven con auriculares que se ve por la calle, debe haber una sordera generalizada.
D. Zorrete:
ResponderEliminarMuy buen observador es Vd. y tiene razón.
(Veo que se ha puesto Vd. apellido)
Estuve un tiempo trabajando en una discoteca los fines de semana (por aquello del sobresueldo y tal) y estaba algo "mosca" después de ver dos o tres sábados a tres mozuelos que me parecía que hacían el bobo poniendo las manos en los altavoces gigantes de suelo haciendo aspavientos.
ResponderEliminarHasta que llegó una clienta profesora de educación especial y me explicó que con las manos recibían las vibraciones y era su manera de "escuchar" música.
Desde entonces los miré con otros ojos.
Lo cierto es que cuando aprendí cuatro señas y me decidí a abordarlos... eran encantadores.
Disculpe la tardanza en contestar su comentario, aunque espero que más vale tarde que nunca.
EliminarLos sordos, en efecto, suelen ser gente muy agradable.