Obligan a un ladrón a comerse 96 plátanos para recuperar una cadena de oro
(de noticiasdealava.com)
La Policía india forzó a comer 96 plátanos a un hombre acusado de robar una cadena de oro, para así conseguir que el objeto pasara antes por su aparato digestivo y poder recuperarlo.
Damu Gupta robó el collar en un viaje en tren a un doctor que viajaba en el mismo vagón que él. Cuando la víctima pidió ayuda y varios pasajeros siguieron a Gupta, éste decidió tragarse la cadena. Tras ser arrestado, la policía hizo varias pruebas al sospechoso (rayos X y ultrasonidos) y comprobaron que, efectivamente, la cadena estaba en el interior del abdomen del detenido. En lugar de esperar a que la cadena de 11 gramos de oro llevara a cabo su particular viaje por el aparato digestivo, la policía obligó a Gupta a comerse 96 plátanos.
Al día siguiente la policía logró recuperar la joya entre las heces del detenido, del que no dieron detalles de su estado.
Me sorprende la delicadeza de la policía india al proporcionar al Damu un alimento tan adecuado para suavizar el tránsito del objeto tragado. En mis tiempos se utilizaba el agua de Carabaña, mucho más expeditiva, aunque desagradable al paladar. Si se trataba de algún recomendado, en vez de Carabaña le administraban unas cucharadas de aceite de ricino, más suave, pero igual de repulsivo.
Cómo avanzan las técnicas policiales. Ese hindú debiera de haberse bebido tres litros de AGUA DE CARABAÑA, que es lo que procedía. A este paso a los que llevan drogas en bolas dentro del estómago les darán, en Barajas, pastel de chocolate y miel.
ResponderEliminarNo me extrañaría, como dice, que les dieran pasteles, ni tampoco que éstos fueran de hojaldre, fresas y nata, que no hay que molestar a esos nobles transportistas.
EliminarAl final el Damu debió quedar con el tubo digestivo y el hígado como un jaspe, de limpios; quedaría sin oro pero de potasio tiene para una temporada.
ResponderEliminarEfectivamente, el fulano salió ganando con esa limpieza y ese potasio a pleno rendimiento. No hay mal que por bien no venga.
EliminarPues hombre, lo pudieron matar de obesidad. El plátano es de los pocos frutos que engordan. Ahora que al ladrón potasio no le faltará en la vida.
ResponderEliminarEs posible que, con la ingestión de tanto plátano (espero fueran de Canarias, al menos) el fulano ha sobrepasado su ración de calorías pero, como dice, va servido con el potasio.
EliminarMe parece un correctivo muy apropiado, aunque puede que no haga caquita en tres meses
ResponderEliminarIgnoraba que el plátano fuera tan astringente. Espero que los que yo consumo, los famosos "platanitos" al estilo de las papas fritas, no tengan ese efecto.
Eliminary ¿Por donde tuvo el ledrón en cuestión que introducirse los plátanos?
ResponderEliminarPpor que por el orto argentino hubieran bastado con dos o tres.
Entiendo que se trataba de que el ladrón expulsara la cadena de oro por el conducto adecuado, o séase el recto. Por el procedimiento que Vd. sugiere, tendría que circular la cadena en dirección opuesta, cosa complicada y con posible multa por la guadia civil.
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