Los peligros de Internet
(de indistar.com)
Un fulano de 41 años se reúne con una chica de 16 años que conoció en Facebook y pierde la cartera, el móvil y las tarjetas de crédito. Segun dice, robado todo por la chica y sus amigos.
De acuerdo con su testimonio a la policía de Indianapolis, recogió a la chica en una urbanización de Noblesville a las 2 de la tarde. Alega que le había prometido pasar un rato de jolgorio en casa de unos amigos. Al efecto, se trasladaron al centro de la ciudad de Indianapolis. Allí fue recibido por varios jóvenes que lo amenazaron con una pistola, lo golpearon y robaron las pertenencias que llevaba encima. Según informa la policía, también le afanaron el coche, un Lexus de último modelo y usaron sus tarjetas de crédito en varios establecimientos. El perjudicado permaneció siete horas bajo la vigilancia de tres de los fulanos hasta que regresaron los otros.
Sobre las 9 de la noche, soltaron al detenido y le devolvieron el coche, por lo que pudo trasladarse a su casa e informar a su mujer que había sido víctima de un robo.
Se ignora si alguno de los autores ha sido arrestado, pero la policía dice que hay siete sospechosos y que tienen entre 14 y 20 años.
Este jili se cree que todo el monte es orégano; le está bien empleado por intentar ligarse a una menor. Aparte de los golpes recibidos, no salió mal del todo porque le devolvieron el haiga. Supongo que a su mujer no le contó la historia completa porque no creo que la señora hubiera aguantado la realidad vigente.
Moraleja: Hace mucho tiempo que escuché aquello de que "Quien con infantes pernocta, asesorado le sorprende el alba". Un buen ejemplo de la veracidad del dicho lo tenemos en esta historia.
Este jili se cree que todo el monte es orégano; le está bien empleado por intentar ligarse a una menor. Aparte de los golpes recibidos, no salió mal del todo porque le devolvieron el haiga. Supongo que a su mujer no le contó la historia completa porque no creo que la señora hubiera aguantado la realidad vigente.
Moraleja: Hace mucho tiempo que escuché aquello de que "Quien con infantes pernocta, asesorado le sorprende el alba". Un buen ejemplo de la veracidad del dicho lo tenemos en esta historia.
Ese indianapolitano o como se les llame a los de ese Estado, está en la edad propia ( entre 40 y 50 años) de hacer el ajilipollúa en los ratos libres.
ResponderEliminarEs cuando algunos de esa media de vida se sienten aterrorizados de haber dejado de ser jóvenes y se enredan hasta con niñas de 16 años. Algunas de las cuales suelen ser más peligrosas que una tribu de rumanos hambrientos.
La experiencia me diced que los hommes son tontos especialmente entre los 15 y los 25 años, y entre los 40 y los 50. Y que la féminas lo son a los 16 años y a los 50 hasta los 65.
Pura teoría personal.
Es una teoría completamente fundamentada. Yo incorporaría a los que, a medida que van superando los 60, empiezan a gustar de jóvenes cada vez más tiernas; en otras palabras, si a los 60 les gustaban las de 45, a los 70 van detrás de las de 35, a los 80 se pirrian por las veinteañeras y así sucesivamente. Es un proceso matemático que, muchas veces, deviene en matrimonios absurdos o, incluso, en denuncias por abuso de menores.
EliminarEn primer lugar felicitarle por haber subsanado un error que no debía haberse producido nunca, y es que la voluptuosidad de Helen debería ser de obligado visionado todas las mañanas mientras se degustan unos croisantitos con el café (como es mi caso en este preciso momento).
ResponderEliminarRespecto al menda lerenda es lo que tiene la juventude de hoy en día, que cuando pasa uno al lado de unos cuantos chavales de 5 ó 6 años jugando al balón pasa uno acojonado, si encima tienen bigotes y ellas teticas mejor echar mano a la pistola.
Gentuza ellos, y él un pringao, conclusión... NINGUNA (ahora mismo toda la sangre la tengo en el "estógamo" y no me llega sangre al "celebro")
Aquí estamos para satisfacen los deseos de los amables lectores. Por cierto, cada vez que menciona Vd. esos croisantitos, me voy inclinando más por el viaje a París.
EliminarEsos chavales tan jóvenes que menciona son un peligro público. Además del balonazo en la cara, hay que cuidarse las espinillas con los que van arrollando con esas patinetas (afición importada de los USA, como tantas otras manías).
Se merecía un par de patadas en el culo, por listo.
ResponderEliminarSe metió en la boca del lobo por buscar otras entradas.
Eliminar¡Pobre napolitano! Solo deseaba volver a ser un chaval por unas horas... No conocía los peligros de Facebook. Quiso pescar una chavala para pecar por unas horas y los chavales lo pescaron a él. La próxima vez debería ir al Starbucks de Noblesville a intentar pescar una teenager con menos riesgo...
ResponderEliminarA los 41 años tendría que concentrar su atención en chicas treintañeras en vez de complicarse la vida con quienes pueden ser sus hijas. El exceso de ambición produce los desagradables resultados que ha sufrido el fulano.
EliminarLas teens y el Starbuks tampoco se lo recomendaría.