Una silla giratoria, de color azul, deja en cinta a las mujeres
(de Metro.co.uk)
Los matrimonios que deseen tener un hijo deberían considerar seriamente un viaje a Milton Keynes (USA) para hospedarse en el hotel Best Western Moore Plaza, donde una silla giratoria ha ocasionado el embarazo de varias empleadas.
Hasta siete empleadas del hotel han dado a luz en los dos últimos años después de sentarse en la silla azul. Cuatro de éllas, Elaine Ledster, Kim Gidley, Laura Burchill (en la foto) y Gina Ripley han concebido ya cuatro niños. Alyce Grisley, Claire Fitchett y Seran Daines, también empleadas del hotel, esperan dar a luz a finales de año..
El personal del hotel ha apodado “Silla de la fertilidad” al extraordinario mueble y algunas se resisten a sentarse en la misma por temor a los posibles efectos. “Al principio nos lo tomamos a broma, pero se ha repetido tantas veces que ya no parece casualidad”, dice Giles Shaw, el director del hotel.
La Burchill coloca a su hijo en el regazo de su padre, que supongo es la mentada silla azul de la fotografía. Aunque el reportaje no menciona los posibles efectos en los varones, me parece arriesgado sentar a un niño en semejante aparato simplemente por salir en la foto.
Quizás la pregunta era que hicieron antes o después de sentarse en esa silla?
ResponderEliminarPués yo casualmente hoy,ya tengo el cupo de historias cubierto.
ResponderEliminarDigo lo mismo que lo que comenta Carolvs.
ResponderEliminarJajaja...me recuerda a aquellas historietas de que una se podía quedar embarazada si iba a no sé qué baños o en la piscina...y si comen un helado se les corta la regla ¿no? ¡Ay, Señor!
ResponderEliminarD. CAROLVS II:
ResponderEliminarEl asunto resulta, en verdad, asaz intrigante.
D. MAMUMA:
ResponderEliminarSi así es, felicidades.
D. Javier:
ResponderEliminarMe parece muy bien.
Dª Maribeluca:
ResponderEliminarMe recuerda al chiste del médico que le dijo a la mamá, presente con la hija: "Señora, su hija está embarazada". "¡Imposible! Mi hija no ha tenido todavía contacto con varón alguno", dijo la madre. Entonces el médico se dirigió a la ventana diciendo: "Pues de aquí no me muevo hasta que vea pasar al Espíritu Santo".
Se sabe en qué despacho está ubicada la silla en cuestión?
ResponderEliminarPorque si está en el despacho del director la cosa huele a chamusquina, y si está en la recepción la cosa huele a exhibicionismo.
Hola, Bwana: ¿Y si por casualidad le da por alojarse allí y, llevada del color gubernamental y su añoranza, le da por sentarse en la silla Azul a Teresa de la Vega? ¿a Cristina Almeida? ¿a Pilar Bardem?
ResponderEliminar¿a Pedro Zerolo? En fin, cosas veredes.
Buen post, excelente blog, amigo.
Saludos blogueros
D. aspirante:
ResponderEliminarNo conozco la ubicación de la famosa silla, pero no sería extraño que hubiera algo de lo que sugiere. Una forma muy sutil de aprovecharse del personal.
D. José Antonio:
ResponderEliminarHa señalado Vd. a un grupo de señoras que podrían causar daños irreparables a la silla; no en vano han ido dejando ruinas por donde han pasado.
Agradecido por su valiosa opinión.
Saludos