(de BBC Mundo)
Al salir del trabajo, una joven pasea por una avenida comercial, se detiene frente a una tienda de ropa, observa distraída un vestido expuesto en la vitrina y entra a echar un vistazo.
Parece ésta una escena de lo más común, si no fuera porque los movimientos de la joven quedaron registrados en las pupilas fotográficas del maniquí que lucía el vestido, elaborando un perfil con su edad, sexo, etnia y hora a la que entró. Datos que serán posteriormente analizados por los dueños de la tienda.
Las maniquíes inteligentes son el resultado del trabajo conjunto entre la firma Kee Square, vinculada a la Universidad de Milán, y la empresa de venta de maniquíes italiana Almax
Según sus creadores, el modelo "Eye See Mannequin", es un maniquí fabricado con materiales biodegradables, que tiene una cámara de video en el interior de la cabeza, lo que le permite captar imágenes que son procesadas posteriormente por un programa de reconocimiento facial.
Con esta tecnología el maniquí puede escanear a todas las personas que le pasan por delante, detectar si se mostraron interesadas en el producto, registrar a qué pasaron y elaborar perfiles con datos como la edad, origen y etnia del individuo.
La tecnología que emplean es la misma que se viene utilizando para vigilar centros comerciales o aeropuertos, pero el hecho de que estas cámaras estén el interior de los maniquíes y no se puedan ver, hace que muchos se planteen si esto no atentaría contra la privacidad del cliente.
Voces de la industria de la moda han manifestado que estos maniquíes-espía podrían estar violando leyes de privacidad de la Unión Europea y de países como Estados Unidos. Pero según Fabio Mazza, director de Kee Square, el sistema elabora perfiles "con un total respeto a la privacidad", ya que el sistema estaría protegido por una "sofisticada mezcla de hardware y software que procesa la información sin necesidad de una computadora".
Con este sistema, el dispositivo no registraría ni enviaría ninguna información sensible, y tampoco dejaría registro alguno de los rostros de los individuos.
Ya sólo falta que coloquen uno de esos artilugios en el vater para calibrar la cantidad y calidad de las deposiciones emitidas por el cliente y analizar su perfil de consumidor. A la vez podrán medir el tamaño de los órganos masculinos para el futuro diseño de ropa interior.
Estamos perdidos.
Ya sólo falta que coloquen uno de esos artilugios en el vater para calibrar la cantidad y calidad de las deposiciones emitidas por el cliente y analizar su perfil de consumidor. A la vez podrán medir el tamaño de los órganos masculinos para el futuro diseño de ropa interior.
Estamos perdidos.
Lo último, eso de colocar artilugios espias en el water, eso sí sería atentar contra la PRIVACIDAD individual de las personas. Lo otro no porque por algo se denominan "establecimientos públicos" a las tiendas y en lo público no debiera de haber "privacidad" alguna, salvo que alguna prima de Isra se pasee por esas tiendas y deje ver todo lo que suelen dejar ver.
ResponderEliminarLa diferencia entre público y privado siempre ha sido muy tenue y suele confundirse lo uno con lo otro. Por ejemplo, no es lo mismo hablar de "un hombre público" que de "una mujer pública".
EliminarLas primas con las que decoran Don Isra y Vd. sus Blogs deslumbrarían las pupilas del artilugio y quedaría inservible.
Yo estoy a favor de espiar todo, al principio la gente se sentiría moLesta pero si convertimos el tirarse un pedo en un vestuario, llevar gayumbos con pegatinas o sacarse los mocos en un semáforo en algo habitual la gente se quitará prejuicios de encima y se comportará de forma natural... lo cual, estoy dándome cuenta, no es nada recomendable.... QUE QUEMEN ESOS MANIQUÍES DEMONÍACOS QUE DAN MAL ROLLITO.
ResponderEliminaraddenda - me agrada comprobar que sigue en perfecto estado de salud Zafira, a pesar del gobierno (que diría Rodríguez Braun)
Lo de tirarse un pedo en el vestuario no creo que lo detecten esos aparatos; que yo sepa ni graban el sonido ni captan los olores.
EliminarLa Zafira se ha retirado a sus aposentos en perfecto estado de salud como bien supone.
Muy interesante y práctica su reflexión sobre la eventual utilidad de la maniquí, para medir el tamaño de los órganos masculinos, porque siempre una tiene que estar preguntando o toqueteando para calcularlo y luego a la hora de la verdad, es el momento de las decepciones...
ResponderEliminarMe alegro de haber sugerido un uso más utilitario para la maniquí espía. Y como bien dice se evitarían esas preguntas indiscretas que suelen contestarse con un farol.
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