El discurso de Obama hey bama bama bama ho ha sido como el horóscopo, les vale a todos. José Luis está encantado, Mariano está encantado...
Por cierto, no me aclaro con las medidas contra la crisis. Chusmeiquer dice que España va a ayudar a Obama, y Sebastián pide que no consumamos extranjero. Laberinto y rompecabezas.
Pues a Obama el grande, tarde o temprano, el puesto le quedará grande, porque de su antecesor todos esperaban lo que dio, es decir guerra y crisis, pero del moreno todos esperan que componga lo que el otro descompuso.
Póngalos usted uno encima de otro, cree un laberinto tridimensional e infernal de siete pisos, y aún así ni por asomo estaremos cerca de comprender dónde se han metido estos. Lo peor, ellos fingen no saberlo y sus votantes intencionales tampoco. En suma, nos vamos a la mierda porque Ariadna ya no se teje ella misma su ropa.
Don Laslo: Tiene Ud. razón. Añado que deben estar en una cuarta dimensión, incomprensible para el cerebro humano (incluído el escaso material que contienen sus cráneos) Estamos bien FUTUTS, como diría un valenciano.
El discurso de Obama hey bama bama bama ho ha sido como el horóscopo, les vale a todos. José Luis está encantado, Mariano está encantado...
ResponderEliminarPor cierto, no me aclaro con las medidas contra la crisis. Chusmeiquer dice que España va a ayudar a Obama, y Sebastián pide que no consumamos extranjero. Laberinto y rompecabezas.
Pues a Obama el grande, tarde o temprano, el puesto le quedará grande, porque de su antecesor todos esperaban lo que dio, es decir guerra y crisis, pero del moreno todos esperan que componga lo que el otro descompuso.
ResponderEliminarLa verá negra.
Salú pue.
Póngalos usted uno encima de otro, cree un laberinto tridimensional e infernal de siete pisos, y aún así ni por asomo estaremos cerca de comprender dónde se han metido estos. Lo peor, ellos fingen no saberlo y sus votantes intencionales tampoco.
ResponderEliminarEn suma, nos vamos a la mierda porque Ariadna ya no se teje ella misma su ropa.
Los que faltaban, Bwana.
ResponderEliminarLos jueces en su laberinto
Don Laslo:
ResponderEliminarTiene Ud. razón. Añado que deben estar en una cuarta dimensión, incomprensible para el cerebro humano (incluído el escaso material que contienen sus cráneos)
Estamos bien FUTUTS, como diría un valenciano.