Una mujer malasia de 108 años, feliz de reencontrarse con su marido de 38
(de heraldsun.com)
Una mujer malasia de 108 años se reencontró con su marido de 38 años, que estuvo un año siguiendo un tratamiento en un centro de rehabilitación, informó la prensa este sábado.
Wook Kundor fue portada de los diarios en 2006 cuando se casó con Muhamad Nur Che Musa, que hoy tiene 38 años.
La pareja se reunió el jueves pasado, después de que Muhamad estuviera internado voluntariamente durante doce meses en un centro de rehabilitación, por consumo de drogas, en Kuala Lumpur, precisó el diario Utusan Malaysia.
"Estoy agradecida de que mi marido haya regresado, estoy feliz de que estemos juntos nuevamente porque lo quiero de verdad", dijo Wook al periódico, que publicó en su portada una fotografía del hombre abrazando el rostro sonriente y arrugado de la mujer centenaria.
"Volveremos a nuestra vida normal y cumpliré con mi deber de esposa, como cualquier otra mujer", dijo ella.
Muhamad contó que su esposa, con la que se casó en el Estado de Terengganu (norte del país), lo fue a visitar cinco veces mientras se encontraba en el centro de rehabilitación.
"Siempre la extrañé. Sé que hice algo malo y estoy arrepentido", afirmó.
El año pasado, Wook había dicho que estaba dispuesta a casarse por 23ª vez porque temía que Muhamad la dejara por una mujer más joven cuando terminara el programa de rehabilitación.
Pero Muhamad afirmó que era la "voluntad de Dios" que la pareja se enamorara y que continúa siéndole fiel.
(de heraldsun.com)
Una mujer malasia de 108 años se reencontró con su marido de 38 años, que estuvo un año siguiendo un tratamiento en un centro de rehabilitación, informó la prensa este sábado.
Wook Kundor fue portada de los diarios en 2006 cuando se casó con Muhamad Nur Che Musa, que hoy tiene 38 años.
La pareja se reunió el jueves pasado, después de que Muhamad estuviera internado voluntariamente durante doce meses en un centro de rehabilitación, por consumo de drogas, en Kuala Lumpur, precisó el diario Utusan Malaysia.
"Estoy agradecida de que mi marido haya regresado, estoy feliz de que estemos juntos nuevamente porque lo quiero de verdad", dijo Wook al periódico, que publicó en su portada una fotografía del hombre abrazando el rostro sonriente y arrugado de la mujer centenaria.
"Volveremos a nuestra vida normal y cumpliré con mi deber de esposa, como cualquier otra mujer", dijo ella.
Muhamad contó que su esposa, con la que se casó en el Estado de Terengganu (norte del país), lo fue a visitar cinco veces mientras se encontraba en el centro de rehabilitación.
"Siempre la extrañé. Sé que hice algo malo y estoy arrepentido", afirmó.
El año pasado, Wook había dicho que estaba dispuesta a casarse por 23ª vez porque temía que Muhamad la dejara por una mujer más joven cuando terminara el programa de rehabilitación.
Pero Muhamad afirmó que era la "voluntad de Dios" que la pareja se enamorara y que continúa siéndole fiel.
He aquí un caso clásico de felicidad conyugal. Doña Wook (que debe estar disfrutando de la herencia de uno de sus 22 maridos anteriores) tiene un capricho con ese punto y él encantado de tener una financiación generosa para sus sesiones de crack. Mientras dure la pasta, tenemos la seguridad de que el mojamed mantendrá su romance con doña Wook y ésta seguirá cumpliendo con sus deberes maritales. Una tierna historia de amor, proclamo.
La Wook esa me recuerda a la Vicegallina : uff, que terror tener que convivir con eso en plan marido.
ResponderEliminarEl amor,es maravilloso.
ResponderEliminarNo me extraña que el tipo se haya dado a la droga. Hay que vér lo que hace el hambre.
ResponderEliminarSaludos.
El amor es ciego. A mí me recuerda un poco a la historia de la Duquesa de Alba, pobriña.
ResponderEliminarHombre puede ser que la Srsa. Wook sea una artista en la cama dada su previa experiencia y le procure al mozo intensos placeres.
ResponderEliminarBwana, ya sabe lo que pasa cuando una vieja sin piños se mete un trozo de pollo en la boca... aquí no hace falta lubricación para disfrutar del sexo.
ResponderEliminarY seamos sinceros, si va de crack hasta las orejas ese es capaz de meterle algo más que miedo a la vicegallina.
D. Javier:
ResponderEliminarSí, se da un aire a la vice. Esperemos que su longevidad no sea tan extensa.
D. MAMUMA:
ResponderEliminarAdemás de maravilloso, es ciego.
D. rodericus2009:
ResponderEliminarEl hambre y la afición a las drogas, mala combinación en efecto.
Saludos
Dª maharani:
ResponderEliminarY cuando más pasta tiene la parte contraria, más ciego se vuelve.
D. aspirante:
ResponderEliminarLo dudo, a pesar de su probable experiencia, no creo que esa señora tenga mucho que ofrecer al gachó.
D. elvis:
ResponderEliminarNo creo que el fulano fuera capaz de hacerle un favor a la vice por muy drogado que estuviera. Para esos menesteres hace falta, además de mucho valor, un estómago a prueba de balas.
Bwana, qué ascazo...
ResponderEliminarDª Maribeluca:
ResponderEliminarTiene razón: el asunto hiede.
Mirando a la esposa... entiendo porqué se droga el pobre tipo.
ResponderEliminarSaludos
D. Matías:
ResponderEliminarTiene razón, el fulano necesita un fuerte estímulo para la tarea.
Bienvenido a este blog.