(1) El cerebro se enciende cuando conocemos a otros con el mismo estatus
( de BBC Mundo )
Nuestro cerebro se acelera cuando interactuamos con personas de nuestro mismo estatus social, según una investigación británica.
La actividad cerebral de quienes se ven a sí mismos como poseedores de un estatus socioeconómico alto se incrementa cuando se relacionan con personas de su mismo grupo social o superior, según los autores.
Los mensajes subliminales sí funcionan. Mientras que aquéllos con un estatus más bajo, muestran mayor interés hacia individuos de un estatus social inferior.
El estudio, publicado en la revista The Current Biology, utilizó imágenes captadas por resonancia magnética funcional, un procedimiento que muestra un mapa de las regiones del cerebro en funcionamiento.
A los 23 participantes, de diferente estatus social, se les mostró información sobre personas de clase alta y baja.
La directora del estudio, del Instituto Nacional de Salud Mental, Caroline Zink, dijo que el estatus social no se basa solo en el dinero, sino también en factores como los logros y las costumbres.
Otra experta, la psicóloga Jane McCartney, que es también miembro de la British Psychological Society, cree que el estudio pone de manifiesto que las primeras impresiones son muy importantes para todos, ya se centren éstas en el estatus, la apariencia o el dinero.
"La gente evalúa si una persona tiene su mismo estatus y qué papel puede jugar en su vida y hace lo posible para que el otro vea que también pertenece a ese mismo grupo social", dijo.
La actividad cerebral de quienes se ven a sí mismos como poseedores de un estatus socioeconómico alto se incrementa cuando se relacionan con personas de su mismo grupo social o superior, según los autores.
Los mensajes subliminales sí funcionan. Mientras que aquéllos con un estatus más bajo, muestran mayor interés hacia individuos de un estatus social inferior.
El estudio, publicado en la revista The Current Biology, utilizó imágenes captadas por resonancia magnética funcional, un procedimiento que muestra un mapa de las regiones del cerebro en funcionamiento.
A los 23 participantes, de diferente estatus social, se les mostró información sobre personas de clase alta y baja.
La directora del estudio, del Instituto Nacional de Salud Mental, Caroline Zink, dijo que el estatus social no se basa solo en el dinero, sino también en factores como los logros y las costumbres.
Otra experta, la psicóloga Jane McCartney, que es también miembro de la British Psychological Society, cree que el estudio pone de manifiesto que las primeras impresiones son muy importantes para todos, ya se centren éstas en el estatus, la apariencia o el dinero.
"La gente evalúa si una persona tiene su mismo estatus y qué papel puede jugar en su vida y hace lo posible para que el otro vea que también pertenece a ese mismo grupo social", dijo.
Me parecen muy interesantes estas conclusiones de personas tan destacadas como Caroline Z. y Jane MC. Hace unos años estuve en una reunión a la que asistieron grandes jerifaltes bancarios y me sentí como si flotara en el aire, de tanta emoción. Ahora comprendo que se trataba de una reacción de mi cerebro, acelerado al estar rodeado de gente de mi mismo estatus social.
Por cierto, ignoro el estatus social de la Caroline Z. aunque, supongo, debe de ser de categoría. Me gustó mucho en "Traffic".
Mañana continuaremos con este apasionante asunto.
Vaya, hombre. También a Ud. se le enciende la bombilla del cerebro cuando coincide con gentío de su calidad económica como Rockefeller o Henri Ford IV.
ResponderEliminarA mí sólo se me enciende cuando coincido con mis iguales los Premios Nobel de Literatura y Gimnasia.
Pues a mí primo se le enciende la bombilla, cuando ve a una tía buena.
ResponderEliminarLos británicos no tienen ni idea.
Es lo que me pasa a mi cuando veo al Rubal y al Zetapé que me hierve la sangre y se me pone a tope el "cervello" que dicen en Italia
ResponderEliminarD. Javier:
ResponderEliminarYa suponía que estaba Vd. incluído en esa categoría; ¡faltaría más!
D. MAMUMA:
ResponderEliminarNo cabe duda que ciertas señoras producen ese efecto en cualquier caballero de buena planta.
D. CAROLVS II:
ResponderEliminarEse par de individuos que menciona, además de alterar el cervell, me producen unas náuseas incontrolables.
Pues qué bien. Como a este paso vamos a acabar todos con el mismo estatus socieconómico de pobres pringados, nos pasaremos el día con el cerebro iluminado.
ResponderEliminar(a mí la Caroline Zeta Jones me cae casi igual de mal que Nicolas Cage)
Dª maharani:
ResponderEliminar¡No me compare a la Z con el Cage, por favor! ¡Un respeto!