Una norteamericana ha sido detenida por negarse a dejar de hablar por teléfono mientras viajaba en un tren de pasajeros.
(de Metro.co.uk)
Lakeysha Beard llevaba hablando por su teléfono móvil a voz en cuello, sin parar, durante las 16 horas que dura el trayecto entre
Parece que los pasajeros se quejaron al personal del ferrocarril de que la Lakeysha no dejaba de parlotear y que no hacía caso a sus peticiones de un poco de tranquilidad. El asunto se convirtió en una disputa que hizo que los empleados llamaran a la policía.
El tren se detuvo en una parada cerca de Salem, en Oregón, donde esperaba una patrulla de la policía que logró detener a la charlatana. Ha sido acusada de conducta desordenada.
Aunque 16 horas parecen un tiempo excesivo para una charla, ni siquiera se aproxima al record mundial de conversación mantenido, durante 51 horas por Sunil Prabhakar, de Kailash Hills, Nueva Delhi, en septiembre de 2009, ni a las 41 horas del británico Tony Wright en 2007..
Los sufridos vecinos del vagón donde se encontraba Lakeysha debieron pensar que llevaban de compañero al mismísimo Fidel, disfrazado de matrona del Mississippi.
Algunos acostumbran a empezar a usar el móvil en cuanto se suben al tren, también en España. En el AVE de Madrid/Sevilla, hace unos meses, había un sujeto que no paró de hablar ¡por dos móviles simultáneamente!, hasta que un par de pasajeros nos quejamos al revisor, que señaló al tipejo el sitio donde podía charlar sin molestar al personal, ubicado entre los vagones.
Sospecho que esta manía se debe al vicio de fardar o darse importancia, aunque el resto de pasajeros no tenga el menor interés en los negocios del sujeto, ni siquiera en sus relaciones personales.
Si hubiera pasado en España... movistar se hubiera frotado las manos :)
ResponderEliminarVietnamitas en Madrid
No hay nada más insufrible que un personaje/a hablando horas al teléfono en un tren...y en estos son especialistas los negros, uy perdón! los africanos subsaharianos, que además lo hacen a grito pelado.
ResponderEliminarSeamos sinceros, lo del móvil es una excusa, negra y gorda en un tren tenía todas las papeletas para pasar la noche en la trena.
ResponderEliminarY como comenta Carolvs, los subsaharianos negros no necesitan teléfono con esas voces.
Srs. vietnamitas:
ResponderEliminarAquí también hay mucho vicioso del móvil.
D. CAROLVS II:
ResponderEliminarCasualmente, el sujeto a quien me refería, ése que hablaba por dos móviles, también era negro. Y también creía que no le escuchaban.
Acertado en un 100%.
D. isra:
ResponderEliminarNo capto su ironía, ¿es que las negras gordas no pueden viajar en tren? Yo creo que si abona las dos plazas que ocupa (debido a la extensión de su espalda) no tendría problemas.
Además en los USA ya terminó la época de la discriminación, según me dicen.
Debía tener tarifa plana, que es una cosa que se la toma la gente como el buffet libre de los restaurantes.
ResponderEliminarMe alegro, porque no veas que viajecito nos dieron unas niñatas hablando a voces de sus amoríos a todos los del vagón, y no les hacía falta el móvil...y luego somos los españoles los que hablamos a voces... hombre, hubiera bastado que pasara el revisor con un esparadrapo.
ResponderEliminarDª maharani:
ResponderEliminarNo sé si llevaba tarifa plana pero no le veo nada plano, la verdad.
Dª Maribeluca:
ResponderEliminarMe pregunto si no habrá algún adminículo que elimine la señal dentro de los vagones, como cuando se pasa por un tunel. Solucionaría todo el problema.
No es necesario llamar para anunciar que "ya estamos llegando, faltan media horita de nada".
Al bajarse sel vagón, se llama desde el andén y santas pascuas.