viernes, 19 de julio de 2013

GUA GUA, CACA, NENE, PIS, YAYA

La Carmel
Nace un nuevo idioma en Australia
(de abc.es)

  Una investigadora estadounidense ha encontrado en el norte del país oceánico una nueva lengua creada por niños  

Si pensamos en los elementos que caracterizan a Australia, probablemente lo primero que nos venga a la cabeza serán los canguros o los koalas. Quizá su arquitectura o incluso su música. Sin embargo, pocos pensamos en Australia como uno de los países con mayor diversidad lingüística del planeta.

Actualmente en Australia se hablan alrededor de un centenar de lenguas. La mayoría de ellas son lenguas aborígenes que pertenecen a algunas de las cerca de 500 tribus indígenas que habitan en la región norte de la principal isla del país.

En ese territorio ha sido donde una investigadora de Estados Unidos ha localizado un nuevo idioma mixto, el warlpiri rampaku o warlpiri ligero, creado a base de combinar variedades del inglés, el kriol y el warlpiri, una de las lenguas aborígenes australianas con mayor número de hablantes.
La responsable del descubrimiento ha sido la doctora Carmel O’Shannessy, una lingüista de la Universidad de Michigan que lleva más de una década dedicada a la observación de la original forma de comunicarse de los niños de Lajamanu, una remota localidad en el norte de Australia con menos de 700 habitantes.

O’Shannessy comenzó a pasar largas temporadas en Lajamanu en 2002 para estudiar en profundidad lo que creyó que era un nuevo idioma con características propias diferentes a los tres idiomas de los que bebía. La primera vez que O’Shannessy habló oficialmente de este idioma fue en 2005, cuando publicó en la «Revista Australiana de Lingüística» un artículo titulado «Warlpiri ligero: una nueva lengua».

En este texto, O’Shannessy hablaba del warlpiri ligero como una lengua hablada por niños y jóvenes adultos, todos ellos menores de 30 años; y explica que el nombre de la lengua fue acuñado por los padres que primero observaron las nuevas formas lingüísticas de sus hijos. Según O’Shannessy, el origen más probable de esta lengua se encuentra en esos mismos padres que, hablantes expertos de varios idiomas, se dirigían a sus hijos mezclando términos de todos ellos.

Sin embargo, la razón por la que ha tenido tanto éxito está en los niños y jóvenes que decidieron que esa nueva lengua creada por y para ellos era una señal de su identidad. «Creo que la identidad juega un papel. Después de que los niños crearan el nuevo sistema, este se ha convertido en una señal de su identidad como jóvenes warlpiris de la comunidad Lajamanu», explicó O’Shannessy al «New York Times». Por esta misma razón, O’Shannessy opina que el warlpiri ligero tiene muchas posibilidades de imponerse al warlpiri, un idioma que podría caer en desuso en un futuro cercano.

No le veo ningún mérito al asunto ni comprendo por qué se fue la Carmel tan lejos si quería descubrir un nuevo idioma creado por los niños. En cualquier hogar español, por ejemplo, encontraría infinidad de palabras creadas por criaturas y que, además, las utilizan los padres. Basta analizar esta interesante charla entre unos gemelos:



Sospecho que esa señora quería darse un garbeo por Australia a ver si ligaba al Cocodrilo Dundee, mientras le daba al Hennessy a base de bien  y sale con esta paparruchada para justificar sus honorarios. Mucha cara tiene la Carmel, proclamo.

8 comentarios:

  1. Muy bien proclamado. Porque para singularidades idiomáticas nada como la ex España actual en donde tres analfabetos constituyen en cada Comunidad una Academia de la Lengua Regional : el asturianés, la fabla aragonesa, el aranés, y el más importante de todos los idiomas : romaní o caló de los gitanos.

    Como bien proclama la O’Shannessy no se ha enterado aún de que las garrafas de Gin en los tenderetes callejeros españoles valen igual que un litro de agua en Australia.

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    1. Esa pendejada de las "señas de identidad" es la excusa para que unos cuantos descerebrados se empeñen en complicar más la falta de entendimiento entre nuestros pueblos.

      Su recomendación a la O´Hennessy esa le habría ahorrado un pastón.

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  2. Lo que es ridículo es el idioma inventado por los adultos para comunicarse con los niños:

    pipi (pájaro), tirtinglés (el corte inglés), popó (lo que viene a ser un truño) y gilipolleces varias, como el hecho de entonar de una forma ridícula y asombrosamente cochambrosa las palabras de ese estúpido vocabulario.

    No sé cómo no salen más traumatizados los niños.

    Me solvidó comentar su post, disculpas.

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    1. Efectivamente, los adultos se empeñan en imitar el vocabulario de sus hijos, con lo que consiguen atrasar su lenguaje. Cuando los papás le hablan al niño de "la yaya, el guau guau, la tata, etc.", el nene registra esas palabras en su cerebro como si fueran buenas.

      No se preocupe Vd. por no haber comentado el post, ya lo habo yo de su parte.

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  3. Había un niño en su cuna y llega un mosquito y se le posa en la pierna. El niño lo observa y le pregunta:
    ¿tu eres un mosquito, verdad?
    - puchi, le contesta
    ¿y me vas a picar, verdad?
    - puchi
    ¿y me vas a sacar sangre?
    - puchi
    El niño piensa un poco y le dice:
    - puchi, puchi, puchi y al mismo tiempo que lo apachurra con su dedo, le dice: puchi puchita tu male.

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    1. Muy interesante esa conversación del bebé y su mosquito, con un final feliz para la integridad del pequeño.

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