jueves, 11 de marzo de 2010

Conducción temeraria


Choque causado por conductora que estaba “afeitándose el área del bikini”

Un choque en Florida (USA) se atribuye al hecho de que la conductora estaba tratando de afeitarse el vello púbico mientras estaba al volante.

(de Metro co.uk)

Según informa el oficial Gary Dunick, el choque entre los dos vehículos fue ocasionado porque la mujer trataba de afeitarse la frontera del bikini, mientras su ex marido, que iba de copiloto, sostenía el volante.

Entonces el coche embistió la parte trasera de una furgoneta.

“La conductora dijo que iba a reunirse con su novio en Key West y quería estar preparada para la visita”, informó Dunick al Key West Citizen." Si no llego a estar allí no lo habría creído. Hace unos diez años paré a un fulano en el mismo sitio que tenía tres o cuatro jeringuillas colgadas de su brazo. Era tan surrealista que pensé que nada podría ser tan extraordinario. Bueno, pues el caso actual lo supera”.

Dos pasajeras de la camioneta fueron trasladadas al hospital de Cudjoe Bay para curarlas de pequeñas heridas después del choque.

A la conductora, identificada como Megan Mariah Barnes, le habían retirado el carnet de conducir el día anterior al choque, según el periódico, después de haber sido declarada culpable de conducir bajo los efectos de las drogas.

Ahora se enfrenta a los cargos de conducir con una licencia revocada, conducción temeraria, carecer de seguro y abandonar la escena del accidente.

La señora Megan debía de haberse tomado alguna cosilla para ocurrírsele afeitar sus partes en un lugar tan inadecuado, habiendo tantos sitios donde los chinos hacen esa operación por cuatro perras. Debía tener mucha prisa en acicalarse para encontrarse con su novio, presumo.

También me sorprende la actitud condescendiente del ex marido que la acompañaba a una cita en Key West con otro hombre. ¿Qué pintaba este señor en la jugada? ¿Será un mirón furtivo?

18 comentarios:

  1. No, si el gentío está muy fuera de razón en cualquier circunstancia.

    Esa dama necesita afeitarse los pelillos del coño para que el novio se ponga más cachondo, justamente delnate de un volnate en marcha.

    Yo la condenaba a estar durante un año afeitando el pubis de mil policias hombres en un cuartelillo.

    Y al exmarido a convivir durante otro año con un rebaño de cabras y cabrones.

    ResponderEliminar
  2. El ex marido "tragaba" con la situación porque realmente llevaba su lengua en "to lalmendra" de la ex como medida de precalentamiento para su nueva cita.

    ResponderEliminar
  3. Menuda guarrería! Eso se hace en el cuarto de baño, hombre, que si no se queda todo lleno de pelos. Lo que no entiendo es por qué no cambiaron de sitio, o sea, que hubiera conducido el ex y ella se hubiera sentado en el asiento del copiloto para dedicarse a sus cosas tranquilamente.

    ResponderEliminar
  4. Yo he visto a más de una conductora depilándose las cejas, pero esto es el colmo de temeridad y de guarrería. Y lo del ex marido sujetando el volante ya es de traca.

    ResponderEliminar
  5. La verdad es que todo esto arroja más dudas que resuelve, tan malo hubiera sido cambiar los sitios entre copiloto y conductor?¿?

    jaja

    Impresionante.

    Saludines,
    YoMisma

    ResponderEliminar
  6. D. Javier:
    ¡Vaya castigos más ejemplares!
    Supongo que la mujer tendría que usar
    una maquinilla, porque no creo que los policías se dejaran afeitar con navaja.
    El castigo al exmarido lo veo bastante ajustado.

    ResponderEliminar
  7. D. isra:
    No sé, no sé...No me hago una idea de la postura del fulano si tenía que sostener el volante.
    Otro asunto, no sé que me pasa con su blog, que pierdo la conexión cuando trato de entrar. (¿será el KGB?)

    ResponderEliminar
  8. Dª Ginebra:
    Tiene mucha razón; yo también me he preguntado lo mismo y lo único que se me ocurre es que el ex no sepa conducir, o que a élla le excite el peligro.

    ResponderEliminar
  9. Dª Maharani:
    No crea, que depilarse las cejas a dos manos, dejando el volante al aire, también tiene lo suyo.

    ResponderEliminar
  10. Dª YoMisma:
    Efectivamente, pero como le digo a Dª Ginebra, el ex no sabe conducir y solo sirve como copiloto. Luego, cuando la mujer se reuna con el novio, possiblemente les ayude a desvestirse.

    ResponderEliminar
  11. la verdad hay gente pa tó

    ResponderEliminar
  12. D. mamuma:
    La condición humana es sorprendente..

    ResponderEliminar
  13. Aún recuerdo muy vividamente un coche que circulaba un dia de estos por la ronda de Dalt en Barcelona haciendo "eses" por el carríl centrál a las ocho de la mañana. Cuando conseguí empezàr a adelantar a aquél peligro rodante,contemplé atónito como la "intefecta", por llamarle algo suave, que lo pilotaba, se estaba aplicando crema anti-arrugas en las "patas de gallo", sujetando el bote de crema con la misma mano que empuñaba el volante, ¡¡a ochenta por hora!!. Lo curioso del caso, es que iba acompañada por otra "secuáz" que le reia la gracia. De las señoras al volante, ya me lo creo todo, y no soy machista ni por asomo, oiga.

    ResponderEliminar
  14. D. rodericus2009:
    El caso que comenta es muy interesante, pero me reservo mi opinión para no herir susceptibilidades.

    ResponderEliminar
  15. No seais tontos, se estaba haciendo unos tirabuzones con los rizos y por un casual, se le enganchó uno de los dedos entre las matas del vello, con tan mala fortuna, que la mano le quedó inmovilizada...!Bájate al pilón, darling!...!Déjate, no sea que se me enreden los pelos del bigote y me quede pegao!...

    ResponderEliminar
  16. Buenas, Bwana. Copio un comentario que sobre este asunto ha escrito hoy el nick Freddie Mac y Fannie Mae en el blog de Santiago González:

    -----
    " Freddie Mac y Fannie Mae dijo...
    Nos encaminamos con paso firme y decidido hacia la neverra:
    Una rubia teñida se dirige en automóvil a la casa de su novio, acompañada por su ex-marido. Nada anormal hasta este momento.
    Por el camino se dice a si misma ¡Andá, el felpudo! cual colegial que se ha dejado los donuts en casa.
    Acto seguido, recurre a su set de depilación que siempre lleva en el bolso y se dispone a realizar tan delicada operación mientras el coche sigue en marcha. Sin embargo se le olvida que carece título oficial de esteticién, seguro obligatorio de accidentes y permiso de conducir, y de que es ella quien está al volante de la máquina. ¿Es esto último un obstáculo para realizar ambas operaciones? ¡en absoluto! Recuerda que el bulto sospechoso que está en el asiento del copiloto es su ex y suponemos que le espetaría lo siguiente:
    Darling, please, will you be so kind to hold the wheel while I shave my (beeeeep)?
    El aludido, sopesando lo que podría encarecer ante un juez la pensión alimenticia del divorcio si se negase a satisfacer esta nueva demanda, no duda en sostener el volante desde el otro asiento.
    Mientras la aquejada de hirsutismo íntimo trata de corregir los síntomas externos de tan penosa dolencia, la pick-up que les precede en la cola de la autopista, ignorante de esta urgencia sanitaria, comete la humorada de frenar en seco.

    Volvamos al Miss Barnes´ Flying Beauty Lounge, porque es ahí donde el relato de los hechos se vuelve confuso.
    Sería evidente que las luces de frenado de la pick-up, aún siendo a pleno día con cielo despejado y en Florida, podrían dar una pista a ambos conductores (rubia y ex, por supuesto) de cuál es el siguiente paso que hay que dar: pisar el pedal del freno, tarea que en este caso compete a Mariah (pronúnciese Maraia) Tal no sucede ¿por qué?
    Es aquí donde el CSI del Miami-Dade County entra en escena, valga la rebuznancia.
    Del análisis del ADN y del residuo de metales pesados de un pelo púbico encontrado en la guantera del carro embestidor, y una vez extraído el tinte rubio ceniza que lo adobaba, se deduce que a pesar de estar mirando hacia abajo la conductora confunde el pedal del acelerador con el del decelerador y acelera, lo que produce un incremento de la inercia del semoviente lo suficientemente intenso como para empotrarse contra la pick-up lineas arriba citada. También se deduce que el timonel estaba con lo vista fija donde no debía, pues no alertó a la maquinista del peligro que se corría (sin segundas) ni evitó la ruta de colisión. Los análisis por rayos láser de trayectoria de haces visuales del ex-y-co-piloto demuestran que en efecto estaba mirando donde no debía, a pesar de la poca novedad que para él tenía la
    el
    lo
    esto, bueno, creemos que no hay porqué entrar en intimidades ajenas. Cada uno (que no don Uno) es muy libre de hacer lo que quiera en su coche, siempre y cuando no ponga la música muy alta.
    Millas más adelante, la patrulla de carretera que detiene a esta pareja de peluqueros ambulantes en prácticas recibe la escalofriante información (que corrobora la costosísima prueba forense practicada) por boca de la hirsuta de que "me equivoqué de pedal", cosa muy lógica habida cuenta de lo ridículos en tamaño que son estos mandos en los automóviles americanos y lo cercanos que están, después de haber suprimido el inútil embrague.
    No nos consta que el conductor que desencadenó la tragedia (el de la pick-up) haya sido encontrado culpable del incidente por su temerario modo de conducir. De momento, en USA Montesquieu sigue alive and well.

    No queremos, bajo ningún concepto, hacer ningún tipo de paralelismo entre esta chusca anécdota y la forma de gobierno vigente, Algor nos libre.

    (Fannie - ¿Qué es una pick-up?
    Freddie - ¡Una fregoneta, coño! ¿qué va a ser?)

    11:33 AM"
    -----

    ResponderEliminar
  17. D. charneguet:
    Una teoría muy interesante la suya;
    queda registrada debidamente.

    ResponderEliminar
  18. Dª Ostra:
    ¡Vaya jugo que le han sacado a la noticia los comentaristas de D. Santiago!
    Se nota que no soy el único lector de "Metro".
    Gracias por la exposición.

    ResponderEliminar