miércoles, 10 de marzo de 2010

Matrimonios por amor

Se casa con su almohada

Lee Jin-gyu se enamoró de su “dakimakura”, una especie de almohada, de gran tamaño y gran suavidad, fabricada en Japón usualmente con la fotografía de algún personaje popular adosada a la misma.

(de Metro co.ku)

En el caso de Lee, su adorada almohada tiene una imagen de Fate Testarossa, protagonista de la serie Mahou Shoujo Lyrical Nanoha de dibujos animados.

Ahora este “otaku” (ver mi post “Hello Dolly”) de 28 años se ha casado con la almohada, después de vestirla con un traje de novia para la ceremonia que se ha celebrado ante un sacerdote local. Las nupcias fueron ampliamente reportadas por la prensa local.

“Está completamente obsesionado con esa almohada y la lleva a todas partes”, dijo un amigo. “Salen juntos al parque de atracciones y se sube a todos los aparatos en su compañía. Cuando sale a comer fuera, se la lleva consigo y la coloca en una silla para compartir la comida”, agregó.

El matrimonio almohadil no es el primer caso de este tipo en los últimos tiempos. El pasado noviembre, otro “otaku” japonés se casó con su novia virtual, Nene Anegasaki, que solo existe en el juego de Nintendo DS “Love Plus”.

He aquí un apasionamiento extremo por la compañera de nuestros sueños. Conozco a gente que se lleva la almohada en la maleta, porque no puede conciliar el sueño con las de los hoteles. Yo mismo tengo una de látex que no la cambio por nada del mundo. Pero el caso del Sr. Lee me parece excesivamente anormal; no digamos la actuación del clérigo, que dio su bendición a semejante patraña.

Me ha llamado la atención el asombroso parecido del apellido de la novia del otro otaku con uno de nuestros veteranos diputados.

24 comentarios:

  1. Mi parecer es que el orbe está poblado por excesiva gente con la olla totalmente hervida y pasada de rosca.

    Cuanto más libre es una sociedad, libre en sentido de no sujeta a castigos de hechiceros y señores feudales, más brotan los que parecían seres humanos y sólo son muñecos con un órgano cerebral que emite ondas eléctricas, pero cuyo cables están totalmente mal conectados en los bornes.

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  2. Después de ver a éste, los del post de Hello Dolly parecen hasta normales. Algo deben estar comiendo en Japón que les está trastornando.

    (el nombre de la segunda, además de al diputado de la ensaimada capilar, me recuerda a los parásitos de los peces)

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  3. Mi hermana pequeña llevaba a todas partes su almohadita de la cuna; todavía la sigue usando pero de ahí a casarse con ella... Claro que, bien mirado, las almohadas no roncan, ni se ventosean con nocturnidad y alevosía, ni escuchan la radio mientras duermen, ni se mueven incesantemente hasta que cogen el sueño, si se atraviesan en la cama, ni...

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  4. Ahí estoy de acuerdo con Gin. Llevo 10 años con mi almohada y no tengo ninguna queja.

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  5. D. Javier:
    ¡Cuánta razón tiene! Lo peor es que esos seres mal conectados son los que nos gobiernan.

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  6. Dª Maharani:
    Creo que el problema de los japoneses es que viven apurruñados en una isla; de ahí sus maniobras de expansión en el pasado.

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  7. Dª Ginebra:
    Lo de la almohadita ya lo observé yo en la primera de mis hijas; era una auténtica obsesión la que tenía con su
    "almuaya", hasta que un día, desesperado con sus lloros, tuve que tirarla por la ventana (a la almohada).

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  8. Dª suri kata:
    Si es que las almohadas llegan a ser parte de nosotros. La mía debe tener lo menos 15 años; cuando sea mayor de edad ya me plantearé su destino.

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  9. El romanticismo del hombre a veces no conoce límites. Y supongo que la flexibilidad de la almohada conseguirá hacer cumplir muchas de sus fantasías...pero bueno, con lo lindas que son las mujeres, ya podría haber sacrificado un poco de suavidad y acolchamiento por una sonrisa de esas que te deja bobo.

    O eso pienso yo...

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  10. Pues me va a permitir Bwana que elogie al pervertido, viva el amor... por cierto ¿por dónde?

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  11. Qué falta de cordura!! ó quizá no, seguro que no le da problemas...
    Un saludo

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  12. Sí, claro, y le consultará todo a su almohada. Lo que yo estoy pensando es en las posibilidades sexuales de semejante artículo. Estoy seguro de que si pienso aunque solo sea un poco me saldrá alguna. Y luego una buena pasta que me gastaré en lavandería.

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  13. Hay gente que está malita, malita.

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  14. Tiene su lógica, ese amor

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  15. D. Explorador:
    ¡Cuánta razón tiene!
    ¿Y esas curvas bien cuidadas y esos labios carnosos? Es que no hay comparación, de verdad.

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  16. D. isra:
    No tengo ni idea; como no sea a base de frotamientos candenciosos, no encuentro otra explicación.

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  17. D. Carlos:
    Como dice su enlace, el amor es maravilloso. Ahora bien, veo algo chungo hacerlo con la almohada, por mucho que se la quiera.

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  18. Mr. or Ms. unwakeable:
    ¡Vaya Vd. a saber! Ver para creer.

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  19. D. David:
    Es que los caprichos suelen salir caros. Y las posibilidades sexuales de la almohada son nulas, en mi opinión. Tal vez algo de erotismo, pudiera ser.

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  20. Dª Marga:
    Efectivamente hay mucha gente descentrada por esos mundos.

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  21. D. mamuma:
    Puede ser, además, un amor correspondido.

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  22. Mmmmmmm
    En esta patología el único remedio es una Marushin Mateba.
    :(
    Y bue.
    Besotes para vos Bwuanita mío.

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  23. Dª Rowen:
    ¿Querés matar al pobre nipon?
    Un beso, guapa ,)

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