Pillan a una ladrona de 168.000 libras esterlinas en la celebración de su matrimonio
(de Metro.co.uk)
El jefe de Kirsty Lane, que había sido invitado a la boda, empezó a sospechar al observar el lujo desplegado en la ceremonia. Actuaban dos orquestas, había fuegos artificiales y un mago durante la fiesta, además de barra libre.
La Kirsty empleó fondos de la empresa para vestirse y para sus damas de honor. También compró una caja incrustada de joyas por 1.500 libras para su iPad.
“ El lujo de la boda fue lo primero que me extrañó. Hasta ese momento, no tenía la menor idea del desfalco”, dice Petter Sutton, el jefe de Kirsty. “Esta chica siempre se estaba quejando de su pobreza y no había hecho nada que nos hiciera sospechar de ella”.. “De pronto, esa boda que era la más lujosa que había visto en mi vida…”.
Dice que el fraude se descubrió cuando, posteriormente a la boda, investigaba algunas discrepancias en las cuentas de la empresa. Según dice Sutton, la Kirsty transfería cobros de la empresa a su cuenta personal.
“Nos llevó dos meses finalizar la investigación”, agregó Sutton. La Lane fue arrestada cuando abordaba un avión con su marido con destino a México para la luna de miel.
El segundo error de Kirsty fue invitar al jefe a su boda. El primero, por supuesto, afanar casi 200.000 euros.
La empresa no parece que tenga un buen sistema de control interno, además de ser más lentos que el caballo del malo. ¡Dos meses para cuadrar los pagos de sus clientes!
Un claro ejemplo de nueva rica hortera. Si es que cantaba de lejos y encima invita al madero al bodorrio...de tontos del culo
ResponderEliminarCosas de inglesas, Don Bwana. Les pierde la horterada. Más horterada que querer presumir ante tu propio jefe de "lujos" tras haber afanado a la empresa la pasta, imposible.
ResponderEliminarHasta el Dioni, que era y es el colmo de la cutrez, es un refinado en comparación a ésta.
Pues yo hasta cierto modo le veo un toque malévolo quizás hasta un poco sofisticadoencantador, es como si te invitan a un festorro y al final te pasan la cuenta... está el pequeño fallo de las vacaciones en la trena pero bueno, nadie es perfecto.
ResponderEliminarLa más lujosa y la más merdellona, sin duda.
ResponderEliminarD. CAROLVS II:
ResponderEliminarDebe ser que le remordía la conciencia por no invitar a la boda al que la había pagado.
D. Javier:
ResponderEliminarTiene razón. El Dioni era un Raffles al lado de esa chapucera.
D. isra:
ResponderEliminarYo pienso que la perdió su afán de "fardar" ante el jefe, o bien que quiso restregarle el botín por la cara al susodicho.
Dª Ginebra:
ResponderEliminarEfectivamente, ¿a qué vienen los fuegos artificiales? No lo he visto nunca en una boda, ni siquiera en Valencia.
Bienvenida de nuevo.
En numerosas ocasiones, los festejos de "los pobres" son el no va más del poderío (y horterío) dando cien vueltas en gastos a los de otros más pudientes...estos días he visto varios reportajes de bodas de guiris calé que quitaban el sentío...cuán horrendos fastos,pardiez.
ResponderEliminarHombre, es bastante ingenua esta tía, fuegos artificiales.
ResponderEliminarDª Maribeluca:
ResponderEliminarYo he tenido la suerte de no ser invitado a ninguno de esos festejos hortera. Sólo en una ocasión, en la boda de un amigo en Valencia, me pareció chocante que nos dieran un paquete de a kilo, de arroz La Fallera, a cada uno, para echárselo a los novios.
D. MAMUMA:
ResponderEliminarEs que lo de los fuegos artificiales es una pasada.
Es que si"eso" que aparece vestida de novia, es la desfalcadora, se entiende.
ResponderEliminarM;antener esas mantecas cuesta lo suyo.
Y es que el valor del novio no tiene precio.
CAPITÁN TRUENO:
ResponderEliminarHa captado Vd. un detalle que puede explicarlo todo.
Bienvenido a este blog.