Intrusos en el Metro de la India
(de Asia News)
Cada tren de Metro en la India lleva un vagón especial dedicado exclusivamente a las mujeres, una política puesta en práctica para proteger a las señoras de comportamientos inapropiados, tales como acoso sexual.
Desafortunadamente, a los varones hindúes les gusta romper las reglas. En efecto, últimamente varios se han ido colando en los vagones sólo para mujeres con la excusa de que no podían encontrar asiento en otro lugar.
Las señoras estaban preocupadas pensando que no había manera de parar esas infracciones. Sin embargo todo cambió el pasado 27 de noviembre cuando la policía de Gurgaon (30 km al sur de Nueva Deli) se presentó en el Metro en respuesta a las quejas recibidas.
Respaldadas por la policía, las señoras han conseguido que los hombres abandonen su vagón. Además, a los invasores se les ha obligado a realizar diez sentadillas.
“Encontramos muchos hombres en el vagón de las señoras” dice S. Deswal, portavoz de la policía. “En el momento en que las mujeres nos vieron llegar, se atrevieron a darles una lección a los infractores”.
Según la prensa local, los hombres estaban avergonzados. En la India, normalmente las mujeres sirven a los hombres. Por lo tanto, que las mujeres les planten cara, es poco frecuente. Si además, esos hombres que parecían en mala forma física, tienen que realizar sentadillas en público, el bochorno tuvo que ser monumental.
Nuestra felicitación a las mujeres de la India. Pero la próxima vez, no esperen a que venga la policía, ustedes solas se bastan.
La "sentadilla hindú" se hace normalmente sin pesas, por lo que supongo que, en este caso, para mayor castigo, obligaron a los intrusos a realizar el ejercicio llevando en brazos a la señora más gorda que iba en el vagón.
(No sabía que los hindúes fueran tan bordes con las mujeres; habrá que leer la opinión de nuestra compañera Dª Maharani).
Cuidadín, cuidadín con esas mozas, que se empieza por poner en cuclillas a los hombres y se termina como aquí con unas marimachos feminazis como la Bibiana.
ResponderEliminarVaya con las Indias,y una putada para los pulpos.
ResponderEliminarComo dice Tella hasta la INdia han llegado las doctrinas de la Gran Líderesa Bibiana, ya hay hasta vagones especiales para ellas (que me parece muy bien que las protegan contra los indios pervertidos que ven un tobillo y se ponen como burro tal moro de la morería, pero sin pasarse hombre...).
ResponderEliminarPues a mí me parece muy bien, a ver si empiezan a cambiar las cosas en un país donde todavía se vende a las hijas o se las casa a cambio de dinero.
ResponderEliminarEn tiempos de mi abuela solucionaban el problema clavándole una aguja de sombrero en sus partes al acosador, pero eso era aquí en España y hace muchos años. Allí atreverse a plantar cara aún es una anécdota.
Aquí ya estarían en la cárcel aunque fueran invidentes que no sabían dónde se metían.
ResponderEliminarDe todas formas, no sabía yo que los hindúes estaban tan necesitados.
Vaya, vaya, vaya, con lo bien que se lo pasan nuestros vejetes restregando cebolleta los días de gran aglomeración en el metro madrileño... menos mal que la India les pilla lejos.
ResponderEliminarDe todos modos uno nunca sabe quien es quien (o qué), ahora resulta que la pajillas tiene cojones...
D. Javier:
ResponderEliminarNo deseo a los hindúes ni a nadie más que les caiga encima una Bibi o similar; sería una desgracia para esas pobres gentes.
D. MAMUMA:
ResponderEliminarInocente de mí, pensaba que los pulpos eran cosa de Galicia.
D. CAROLVS II:
ResponderEliminarMucha necesidad deben sufrir esos ciudadanos para tener esa querencia hacia el vagón feminista. ¡Con lo sencillo que es ir por las buenas!
Dª maharani:
ResponderEliminarAgradeazo mucho su autorizada opinión. Muchas gracias
D. aspirante:
ResponderEliminarA mi también me sorprende que, a estas alturas del siglo, haya tanto necesitado de contacto humano. Un servidor, que tiene agorafobia, no puede comprenderlo.
D. isra:
ResponderEliminarDe la pajillas me creo cualquier cosa. ¡Menudo punto es la criatura!
Veo, Don Bwana, que "hambre" se pasa en todos los continentes.
ResponderEliminar¡Mon Dieu!
Pues yo voy a proponer que en el metro de Madrid, pongan un vagón para hombres, otro para mujeres y niños, otro para Gays y lesbianas y otro para arrejuntarse, haber lo que sale.
ResponderEliminarUn saludo
No sé como será el acoso en la India, pero sé que en Japón y Corea es práctica habitual acosar a las mujeres en público, en las bullas del metro y autobuses. Está bien, sea donde sea, que las mujeres reivindiquen su libertad e igualdad de derechos, y no estén sometidas a nada ni a nadie. Un cordial abrazo.
ResponderEliminarD. Carlos:
ResponderEliminarMucho "hambriento" hay por ahí. No lo termino de entender, ¡con lo barata que está la "comida"!.
Un saludo!
D. Manuel:
ResponderEliminarSi no le importa, que pongan tres vagones para gays y lesbianas. No cabrían en uno.
Saludos
D. PACO:
ResponderEliminarLas cosas por Oriente dejan mucho que desear.
Un saludo
Eso es violencia de género.
ResponderEliminarEsa brutalidad debería ser frenada por la ONU.