Éste es el fabuloso aeropuerto de Hong Kong, cuya foto debía habr publicado en mi entrada anterior pero, por circunstancias ajenas a mi voluntad..(en realidad es que he perdido aptitudes, después de una ausencia tan prolongada del Blog).
Lo extraordinario de este aeropuerto es que los ingenieros "robaron" el espacio que ocupa, al mar. Una obra gigantesca, a base de mucho trasiego de rocas.
El viaje desde el aeropuerto al centro de la ciudad tardó 45 minutos, a pesar de que el taxista, admirador de Fangio, iba a toda pastilla por los numerosos puentes y atascos de tráfico.
Una vez dejada mi sobrina en las instalaciones de la Asociación, servidor alquila una habitación en el Hyatt, una cadena de hoteles que ya conozco.. La habitación, muy elegante y cómoda, con vistas espectaculares::
Tras una noche de sueño reparador y un desayuno reconfortante, me encuentro con mi sobrina en las faldas del pico Victoria, el más alto de Hong Kong y que nos han recomendado por las preciosas vistas que se contemplan desde allí. Afortunadamente hay un teleférico que sube al pico. Las vistas, en efecto, preciosas
Para regresar a tierra, mi sobrina se ha empeñado en hacer el trayecto a tracción animal, menos mal que era en bajada.
Como resultado de tanto ejercicio, estoy dispuesto a probar los platos de la cocina cantonesa, aunque me parezcan sospechosos.
Continuará
Los hoteles de la cadena HYATT suelen ser de lo más confortables, así que ha estado bien hospedado.
ResponderEliminarLo de baja a pié desde la cumbre del Pico Victoria no me convence mucho habiendo parapentes y otros utensilios voladores, pero con los sobrinos y con los nietos no queda otra que hacer su voluntad.
Preciosas fotos las que nos muestra. Lástima que no se vea a ningún chino jonkonés.
Lo de parapentes, Vd. me perdone, no lo considero apropiado para una persona de mi edad; prefiero bajar las cuestas de manera clásica, usando pies y piernas que para éso están.
EliminarPrometo satisfacer su curiosidad respecto a los vecinos, en mi próxima entrada.
Lo de aventurarse con la cocina cantonesa, es eso, una aventura jajaja.
ResponderEliminarPor lo que se ve en las fotos hacía calorcito... Por cierto, muy guapa tu sobrina.
Saludos.
Sobre todo cuando sirven en veinte platillos, a cada cual más intrigante.
EliminarGracias, de parte de Celia.
Un saludo