El Nuevo Año nos ha traído una desgracia inimaginable: ¡HA DESAPARECIDO EL SOL!.
El año 2018, al menos en Madrid, se ha presentado sin su habitual brillo y ya van siete días sin que aparezca esa luminosidad característica de los cielos de la capital. El éxodo típico a las playas va a estar mucho más justificado si continúa esta pesada nubosidad.
Consecuencia de esta oscuridad es el incremento en el malhumor del personal: ya nadie da los buenos días, por no hacer el ridículo. Incluso en las familias más apegadas se han producido disturbios sin sentido. Ni siquiera la llegada de los Reyes Magos ha logrado solucionar el problema.
No me gustaría, a mi edad, volver a la rutina de las mudanzas, por lo que espero, con ansiedad, el regreso de RA lo antes posible.
Lástima, Don Bwana, por las carencias vitales que denuncia en esa capital. Dado que vuestra merced a lo largo de su vida ha debido de realizar más de 5.000 mudanzas, le sugiero que vuelva a intentarlo y se situe en algún lugar como FORMENTERA o SICILIA.
ResponderEliminarGracias por su recomendación, aunque la visita a Sicilia no me convence, por lo que he oído de la "cosa nostra", muy popular en la zona.
ResponderEliminarDe todas maneras, hoy ha salido un sol esplendoroso en Madrid, por lo que parece, el problema está solucionado.