Dejan a las vacas en Argentina sin DIU ni «vacuna contra la tristeza»
El Ministerio de Agroindustria decidió interrumpir los programas de apoyo a un anticonceptivo en el sector bovino
(de abc)
El ajuste económico, en época de «vacas flacas», también afecta a los vacunos que, a partir de ahora, dejarán de recibir las llamadas «vacunas contra la tristeza» y los DIU (Dispositivos Intrauterinos) que se aplicaban a las hembras cuyo destino era el matadero.
El Ministerio de Agroindustria dio de baja varios proyectos en ese sentido que le habían costado, en los últimos años, unos seis millones de euros a las arcas públicas. Las iniciativas, desarrolladas durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, se incorporaron en el 1013 pero sus resultados, a juicio de la actual Administración, fueron dudosos.
El Programa Nacional de Prevención de la Tristeza Bovina, consistía en una vacuna para evitar el «complejo tristeza bovina», conocido por sus siglas CTB. En rigor, se trata de las enfermedades babesiosis y anaplasmosis bovinas que transmiten garrapatas e insectos. Este tipo de infecciones se registran principalmente en las provincias norteñas de Argentina y pueden provocar disminución de la productividad así como abortos y hasta la muerte del ganado.
Por su parte, el Programa Nacional de Promoción del Dispositivo Intrauterino, como se denominaba oficialmente, se utilizaba en las vacas descartadas para reproducción para evitar que llegaran preñadas al matadero. Según el veterinario que propuso el plan, Enrique Turín, entre el 20 y el 25 por ciento de estos animales llegaban con fetos que competían con los nutrientes de la madre y la producción de carne, según informa «Clarín», se resentía entre el 4 y el 6 por ciento. Para colocar los dispositivos Argentina llegó a comprar 400.000 DIU que fueron aplicados por quinientos personas contratadas para ese fin.
Según versión de un veterinario amigo, esa tristeza de las vacas no la causan las garrapatas esas, sino que es la consecuencia del suplicio que sufren con el toqueteo diario de sus ubres y sólo una vez al año la visita de los toros.
Según versión de un veterinario amigo, esa tristeza de las vacas no la causan las garrapatas esas, sino que es la consecuencia del suplicio que sufren con el toqueteo diario de sus ubres y sólo una vez al año la visita de los toros.
Curioso lo de la enfermedad esa de TRISTEZA BOVINA. Y se explica si hacemos caso a su sugerencia : las pocas o ninguna visitas de los toros a sus asentaderos.
ResponderEliminarSospecho que tal enfermedad no es sólo bovina y que circula por ahí mucha CURVI con síndrome de ser invisible a los varones.
Lo que dice de esas CURVI es lo que debe pasarse a una vecina-morsa y por lo cual siempre esta de mala milk.
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