Siempre me había asombrado la firme posición de los mentones de los soldados al desfilar, hasta que descubrí el truco: se trata de una sencilla aguja colocada estrategicamente, como se demuestra en la siguiente fotografía:
Todo tiene explicación en esta vida, si exceptuamos, por supuesto, que en España haya tal exceso de senadores, diputados y consejeros, y que ningún gobierno se decida a reducirlo; éso no lo aclara ni papá Dios con toda su sabiduría y poder.
Ese soldado debe de ser corano del norte o similar a tenor del escudo que lleva en la solapa de la guerrera, y claro así es como parecen hasta soldaditos de la Wehrmacht.
ResponderEliminarLo del exceso de senadores, diputados, consejeros, choferes de coches oficiales, asesores de alcaldes, etc. tiene su explicación básica en que somos el país más rácano de Europa Occidental y Oriental y cada partido que gobierna coloca hasta a los primos segundos de los cuñados de las consortes respectivas.
Incluída la Espe Aguirre tal como hace poco nos hemos enterado.
Acierta Vd. de lleno pues, en efecto, es un soldado de Corea del norte.
EliminarEse exceso de enchufados es evidente hasta en la televisión; antes aparecía una señorita o un señorito que daba las noticias élla o él solitos. Ahora aparecen parejas que, una vez hecho el comentario pertinente entre los dos o las dos, pasan el micrófono a un tercero que, en ocasiones, lo cede a un cuarto locutor que desarrolla la noticia. Inflación galopante, proclamo.
Es un placer que haya vuelto vuestra merced a estos lares justo a tiempo de darse un garbeo por Donostia el día 21 para comer la chistorra de Santo Tomás.
ResponderEliminarMuy amable de su parte, pero temo que voy a quedarme sin conocer esa célebre chistorra tomasina; tengo compromisos ineludibles que me obligan a permanecer en Madrí por una temporada.
EliminarQue cabroncetes.
ResponderEliminarEn la mili hay que aguantarse.
EliminarBienvenido a su propio espacio y espero que muy restablecido o mejor. El humor nunca le falta. Esto del alfiler es uno de los muchos motivos por los que no me atrae ese mundo, aunque ya es tarde para que me esperen.
ResponderEliminarMuchas gracias por sus deseos; lo de mi mejoría, habrá que esperar, según el galeno.
EliminarA mi tampoco me esperan desde hace decenios; otra de las ventajas de cumplir años.
Esto, don Bwana, debe ser donde el comunista gordo. A mí me gusta ver en la prensa a los comunistas millonarios, incluso a los españoles; la hoz y el martini, el comunismo caviar, etc. Tenemos que observar todos los que no somos comunistas que al lado de los comunistas de siempre no hay gordas; el régimen comunista no admite compañeras gordas, gobernantas gordas o, simplemente, barraganas gordas. Incluso los militares acompañantes son viejecitos y chupaítos.
ResponderEliminarEn efecto, se trata del país del comunista gordo.
EliminarRespecto a la esbeltez de las camaradas, permítame que discrepe; he visto a varias que parecían superar las dos arrobas en canal.