PETA denuncia a un pastor por "abusar verbalmente" de sus ovejas
La inédita situación se vivió en una granja australiana Los ecologistas implicados debaten sobre si las ovejas son capaces de entender los insultos.
(de LD)
La organización animalista PETA ha denunciado a un pastor por utilizar "violencia verbal" contra sus ovejas en una granja de Nueva Gales del Sur, en Australia. Según informa la cadena ABC, la denuncia se hizo en septiembre del año pasado y el colectivo decidió emprender acciones legales contra la propiedad por supuestas prácticas abusivas, que incluían insultos pronunciados delante de los animales.
El encargado de la granja mostró su sorpresa por una denuncia que implica que los animales "sean capaces de comprender el inglés" y defendió que no había "crueldad" alguna en su comportamiento. "Gritar o no a las ovejas debería ser la última de nuestras preocupaciones", defendió. El colectivo, sin embargo, defiende que existen pruebas de las malas prácticas y que siempre se ha de investigar cualquier denuncia que implique un posible maltrato animal.
La cadena se hace eco del debate que ha suscitado el asunto entre los propios ecologistas, entre los cuales hay quien opina que las ovejas son capaces de vivir los insultos como un maltrato: "Un abuso verbal extremo contra un animal, ya sea un humano o una oveja, constituye un acto de violencia". Otros defienden que los pastores deben ser capaces de controlar sus emociones: "Hay algo inherentemente violento" en quien "insulta y grita" delante de las ovejas, defienden.
Desde la propiedad, mientras, insisten en que no han cometido infracción alguna: "Continuaremos comportándonos como siempre, con normalidad".
Supongo que las llamarían "vaca-burras" u otro insulto similar, a causa del exceso de grasa que llevan encima las ovejas australianas, lo que es una falta de respeto imperdonable para esos pobres animales. Menos mal que la PETA está al loro en cualquier parte del planeta y dispuesta a socorrer a cualquier animal, aunque les llamen hijos de PETA.
Supongo que las llamarían "vaca-burras" u otro insulto similar, a causa del exceso de grasa que llevan encima las ovejas australianas, lo que es una falta de respeto imperdonable para esos pobres animales. Menos mal que la PETA está al loro en cualquier parte del planeta y dispuesta a socorrer a cualquier animal, aunque les llamen hijos de PETA.
Muy bueno, Don Bwana, esos ecolo-tonticos son capaces de demandar a la Luna por considerar que en "menguante" adquiere forma insultante hacia los restantes planetas del sistema solar.
ResponderEliminarAl australiano, bastante bruto en sí en general, imagino que le encantaría tener delante de su persona a un "hijo de PETA" para decirle lo que piensa de su intromisión en la relación que mantiene con sus ovejas.
En Australia hay una colección de bichos (con perdón) que deben hacer las delicias de los Petas. Les vendría bien darse un baño por las playas de Whitehaven, por ejemplo, para saborear un mordisco del cocodrilo de mar o una caricia de las medusas keesingias.
EliminarAnda con los PETA,
ResponderEliminarLo que hay que hacer, para llamar la atencion
No tienen nada mejor que hacer los pobres.
EliminarA los de PETA se les ha ido un poco la cabeza. También es insultante para el resto de humanos que ellos sean tan ignorantes y que no sepan que aquello que defienden, los animales, pasan de nuestro lenguaje y nuestros insultos. De echo ellos se han hecho acreedores a neustros insultos. Mas allá de esto no les entiendo. Defienden a los animales y me parece bien pero los seres humanos no somos precisamente del reino vegetal ni del mineral. ¿Por qué a nosotros no nos defienden? ¿Y si tienen que defender a un bebé de una rata de alcantarilla? ¿Por cual mediarían? Son cuestiones que me suscitan los PETA.
ResponderEliminarAlgunos humanos, si me permite discrepar, parecen pertenecer al reino vegetal. Y no estoy señalando a ningún político.
EliminarLas cuestiones que le suscitan los de la Peta me causan iguales efectos. He visto alguno proclamando la belleza de la cucaracha de panadería. Y, al menos, ésas no muerden, que yo sepa.
Animal-socialismo...dará mucha risa pero son de los del santoral del chucho de la enfermera y aviso que no pienso dejar de comer chuletillas ni chorizo
ResponderEliminarHace muy bien en no privarse de esas delicias. Yo hago lo mismo, aunque no le hago ascos a unas alcachofas en tortilla, o a unos espárragos con mayonesa.
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